Es importante distinguir entre las personas que son asociales porque muestran desinterés por las relaciones y las que lo son porque temen al rechazo. Las primeras se enmarcarían dentro de lo que el DSM-IV denomina como trastorno de personalidad esquizoide (perteneciente al grupo A de trastornos y anteriormente explicado) y las segundas son las que encajarían dentro del trastorno de personalidad por evitación.
CRITERIOS DIAGNÓSTICOS PARA EL TRASTORNO DE PERSONALIDAD POR EVITACIÓN (DSM-IV)
Un patrón general de inhibición social, unos sentimientos de inferioridad y una hipersensibilidad a la evaluación negativa, que comienzan al principio de la edad adulta y se dan en diversos contextos, como indican cuatro (o más) de los siguientes ítems:
- Evita trabajos o actividades que impliquen un contacto interpersonal importante debido al miedo a las críticas, la desaprobación o el rechazo.
- Es reacio a implicarse con la gente si no está seguro de que va a agradar.
- Demuestra represión en las relaciones íntimas debido al miedo a ser avergonzado o ridiculizado.
- Está preocupado por la posibilidad de ser criticado o rechazado en las situaciones sociales.
- Esta inhibido en las situaciones interpersonales nuevas a causa de sentimientos de inferioridad.
- Se ve a sí mismo socialmente inepto, personalmente poco interesante o inferior a los demás.
- Es extremadamente reacio a correr riesgos personales o a implicarse en nuevas actividades debido a que pueden ser comprometedoras.